Cada semana, desde hace unos meses, Morgan d'Aix espera al mismo tipo. Cuando lo ve acercarse, ambos se dirigen a los pasadizos subterráneos secretos de la ciudad, sin mediar palabra. No disponen de mucho tiempo. El negro saca su polla y se la mete en la boca a Morgan. Entonces el culo caliente se da la vuelta para que su amigo secreto pueda comerle el agujero y luego follarlo duro, agarrándolo fuerte por las caderas. Morgan grita de una forma muy excitante... Cuidado que no te pillen...