Las cosas están agitadas en la galería de arte para preparar la próxima exposición sobre la ciudad de Nueva York. La presión es tal que la gente practica sexo en todos los rincones para desahogarse. En el despacho del Director, así como en las salas de exposiciones y en la plataforma de entrega, lo hacen en todas partes. El edificio está abarrotado de tías buenas gays vestidas de punta en blanco: un hombre de negocios en busca de nuevos talentos, altos ejecutivos, representantes de ventas e incluso artistas. Para obtener un descuento, los compradores están dispuestos a follarse a los representantes de ventas, que están encantados de recibir corridas faciales. El mismo método de negocio para los artistas, dispuestos a hacer mamadas y a dejarse follar con tal de vender sus obras por unos euros más. Les affaires, c'est les affaires. Los negocios son los negocios...